Se conoce con esta palabra a una forma de <dependencia externa caracterizada por la continuada y astuta cesión de un país ante las presiones de un vecino poderoso para evitar males mayores. La palabra se originó en la política exterior que durante los años de la primera postguerra del siglo XX siguió Finlandia, bajo el liderato de Suho Passikivi, con relación a la Unión Soviética, para evitar ser anexada a su territorio. Fue una larga disputa, en la que Finlandia perdió espacio territorial, hizo concesiones comerciales, se declaró neutral en la >guerra fría, formalizó arreglos “amistosos”, en el marco de una creciente dependencia de la URSS, pero evitó finalmente su incorporación al imperio soviético.
Este es el origen histórico de la palabra finlandización que, como he dicho, designa a una forma peculiar de dependencia externa.